La memoria del olvido : La fugacidad de lo eterno

lunes, 10 de septiembre de 2007

La memoria del olvido


Somos nuestra memoria, somos ese quimérico museo de formas inconstantes, ese montón de espejos rotos. J.L.Borges




Mario volvió de Villa Gesell de un viaje que le regalamos entre unos amigos, hacia treinta años que él no retornaba ha dicho lugar, emocionado dice:

- Negro, no te das una idea de lo lindo que estaba, pude comprobar que la frase de Galeano es cierta, no me entraba todo el mar en los ojos, no sé como agradecerles.

Sus ojos sensibles dejaban entrever la emoción a través de las lagrimas, entonces le pregunto que le sucedía hace silencio para después decirme

-Vos sabés, la última vez que fui con mis padres, tenia unos diez años, de ellos solo recuerdo los abrazos de mi padre, la suavidad de las manos de mi madre, el sonido de su voz, pensé que al tocar el agua o sentir la brisa del mar volverían a mi todas aquellas imágenes, pero no hermano, fue inútil me di cuenta que la memoria forma parte del olvido.

Al observarlo me doy cuenta de mis limitaciones cuando un problema me supera, él a los diez años fue perdiendo la vista hasta quedar ciego, a pesar de eso conserva el humor, muchas veces al encontrarlo en la calle, cuando lo llamo, se da vuelta y me dice - Uh!! Disculpa no te vi, es que estoy siguiendo a esa rubia que me vuelve loco.

La memoria tiene la virtud de jugarnos una mala pasada, para transformar los recuerdos más brillantes, en simples nebulosas y así cambiar su forma, su tamaño.

Mientras me sigue hablando pienso en el porque de su agradecimiento para con nosotros…cuando termina de hablar le transmito mi inquietud.

-¡¿Cómo porqué?! Ustedes tuvieron suficiente memoria para acordarse de mí.

Sonrío con el alma y lo imagino respirando el mar, atrapando vientos, arrinconando paisajes que solo él puede ver.

Atrapando para siempre el sonido susurrante del mar dentro de sus mares interiores.

Dichoso, me digo…quien pudiera!





6 comentarios:

Lena dijo...

... justo yo hablo en mis ultimos post sobre la memoria...aunque es sobre la memoria de un pueblo, de la historia...porque creo que debemos luchar contra ese olvido...

Un saludo,
Lena

AiguaMel dijo...

Los recuerdos se van, según van pasando los años, pero las emociones y los sentimientos que nos transmitieron son mucho más difíciles de modificar y los buenos se quedaran para siempre con nosotros y los malos nos costará modificar para que no sigamos viendo las cosas bajo ese prisma.

Un abrazo muy fuerte

Marie dijo...

Yo tengo la facilidad envidiable de poder plasmarlo??? y vos???, vos me llevás de viaje con tus historias, amigo!!!...

Un abrazo enorme.

Anónimo dijo...

Leo y me quedo pensando en muchas cosas... (lo mejor que puede suceder).
Uno que tiene la dicha de "ver", vemos o miramos? Cuántas veces miramos sin ver?
Esa sensiblidad del no vidente (inalcanzable para nosotros), y plasmada aquí en relació con el mar, el olvido, la memoria...
Alguien dijo..."sólo estamos construidos de olvido".
Pero es porque éste no existe.

Es otra forma de la memoria...
Y hay manera y maneras de vivenciarlas.

Quién puede decir cuál es la mejor?

Un beso grande

todas las cosas que vienen me recuerdan a ti dijo...

Lena, lei tu blog y a decir verdad me resulta cada vez que entro mas interesante.

Un abrazo

Aiguamel, siempre voy a estar de acuerdo con vos.

Un beso

Abril, descubri otra faceta tuya y tambien es agradable.

No te lo tomes tan a pecho, si te copiaron, es porque era bueno.

P_R dijo...

me ha encantado. he leido varios post tuyos pero elegí comentarte en este porque aqui está la etiqueta de EL, que siempre me reune con lo más impensado o con lo que venía pensando. muchos saludos. paloma